sábado, 12 de abril de 2008

Demasiado para mí

Y una vez más, te pierdo.
Parece casi como si lo hiciera a propósito, pero en realidad busco todo lo contrario.
Es difícil de explicar, son cosas muy raras. Raras para el resto y también para vos, pero no raras cuando se trata de mí, no. No voy a dar vueltas sobre lo mismo, vos entendés.
Siempre me siento muy nerviosa cuando estoy por hablarte, pero me pasa los momentos previos porque una vez que decimos algo me siento bien. Porque me hacés bien supongo. Nada me puede hacer mejor que lo que realmente necesito.
Y quisiera tenerte más cerca, mucho más.
Si hay algo que no me gusta de mí es que pienso demasiado todo. Así sólo logro preocuparme. Esta semana pensé mucho, sobre vos. Me pasan cosas muy contradictorias, había pensado en enumerarlas pero luego me dí cuenta de que no son tantas en verdad y se haría muy complicado.
Por un lado creo que en ninguna forma sos la persona adecuada para mí. Lo dije muchas veces, lo sé. No coincidimos en nada, y eso en realidad no podría ser un problema, y no lo es. Pero no sos la clase de chico que busqué. No puedo explicarte bien por qué, pero son cosas pequeñitas que me hacen pensar en que no estamos destinados ni a una amistad.
Sin embargo hay veces en que te veo tan perfecto. Y sé que en el párrafo anterior dije exactamente lo contrario pero me pasan las dos cosas. No sé si perfecto, pero me gustás mucho y hay veces en que sos tan tierno. Eso me encanta. Otras en que no y me pregunto que será lo que te pasa conmigo. Con esto tampoco pretendo que te conviertas en alguien tan dulce que de pronto me empalague, pero me gustaría que fueras un poco más demostrativo porque el que no lo seas me hace pensar que no importo.
A veces me digo que si estuvieramos juntos cambiarías, porque tal vez no demuestres nada porque yo no lo hago. Eso no lo puedo saber.
Otro punto en contra podría ser cuando me mentiste. Fue duro saber que había otra mientras estaba yo. Me hubiera gustado no enterarme. Si de todos modos ya habías terminado ¿Por qué me lo contaste? No quería saberlo. Y si yo no lo supe, mucho menos ella. ¿Y si todo esto termina bien y en un futuro soy ella? Lo que hiciste estuvo mal. Si lo hiciste una vez, lo hacés dos. No quiero eso. Porque sé que te perdonaría y lo harías mil veces más. Y te perdonaría las mil veces. ¿Lo harías?
Quisiera ver tu sonrisa. Es extraño que me diera cuenta después lo linda que es.

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