Sólo porque tenía la excusa perfecta, decidí hacer el último intento para acercarme a él.
Quizás si le demostraba que quería verlo, algo cambiaba. Pero no me dijo nada. Odio cuando no hace nada. Le dije que quería verlo y nada. Hubiera preferido que me rechazara, porque que se haga el difícil me pone loca.
Es que yo ya me hago a la idea de que no lo veo más pero conociéndolo, sé que después me llega un mensaje que dice que nos veamos ya. Y no sé qué hacer.
En fin, me sentí como "nada" habiéndole dicho eso y sin respuesta, pero después me da esas señales que me hacen creer que se acuerda de mí. Y soy momentáneamente feliz.
Aunque sé que él no vale ni un poco la pena.
Hace 4 años